16 octubre
2023
Opinión
En esta tercera etapa que
viene se abre la posibilidad de entrar hacia nuevas formas de enfrentar el
proyecto estatal con una profunda actitud, hacia esa mitad del camino de su
gobierno en la que se va a desarrollar.
No hay una receta para
gobernar a Guerrero ante las hegemonías regionales e intereses ancestrales, la
actitud de la gobernadora debe de seguir siendo una constante, ante lo que se
vaya enfrentando.
Porque la tercera etapa debe
de ser la de la consolidación en la salud, educación y programas sociales, no
hay otro camino, solo la de trabajar con una buena estrategia de labor en todas
las regiones del estado.
En el primer año de gobierno,
se cambiaron los estilos y costumbres de hacer política financiera, económica,
inspirados en el proyecto de nación de la 4 Transformación, y a muchos no les
gustó.
Para el segundo año, por
cierto, muy pronto vinieron las reacciones, cuando empezó el surtido de
medicamentos en las regiones más olvidadas, como la Montaña, Costa Chica y la
Sierra.
Así también en educación,
comenzó a tomarse en cuenta en las entregas de plazas a las normales publicas y
rurales, independientemente de los conflictos tan normales que se dan entre
ambas instituciones.
Se intensificó el trabajo de
imagen urbana en Acapulco y Zihuatanejo, y otros municipios de playa, a través
de la Promotora Turística, y la Promotora de Playas para el caso Acapulco.
Los demás trabajos de imagen
urbana corresponden a los respectivos municipios con sus alcaldes, el gobierno
no les puede hacer todo el trabajo, y no nada más por el presupuesto, si no,
también por el tiempo, porque hay otros municipios por atender.
La administración de la
gobernadora Salgado, le entró de lleno a los servicios públicos en los
municipios, con gran intensidad, inclusive obras que son exclusivas de los
presidentes municipales.
Especialmente con la
introducción de agua potable, en comunidades olvidadas y lejos de sus
cabeceras, hubo poblados de acuerdo al sentir ciudadano, que nunca pensaron contar con agua potable.
En el mismo caso está la
introducción del drenaje, en localidades que eran focos de infección por la
contaminación de las aguas residuales que fluían por sus principales calles,
varios pueblos tienen drenaje y agua potable, como en ninguna otra
administración.
No se diga en la en
pavimentación de caminos rurales, independientemente del programa de caminos
artesanales, se le ha invertido mucha a la obra pública en pavimentación y
caminos saca cosecha.
Por ello, en esta tercera
etapa, se va a contar con una mayor infraestructura carretera, en las
comunidades, en varias partes del estado, que tiene que ser aprovechada en este
tercer periodo de gobierno, para activar y desarrollar algunas economías
regionales, a través de programas o de la inversión misma.
La tercera etapa que viene de la gobernadora Evelyn Salgado, tiene que ser la de la consolidación, en el desarrollo económico y financiero.
federicosol@yahoo.com.mx