El ochenta por ciento de los doctores empleados por farmacias Similares en Guerrero, provienen de la Universidad Autónoma de Guerrero.
10
octubre 2022
Federico Nogueda Berdeja
No se trata de analizar algunas estampitas de caricaturas o de aventuras animadas, por el cabeceo de la columna, ni de agarrar partido, nada de eso, simplemente el debate a los cuestionamientos que realizó el doctor López-Gatell al doctor Simi o farmacias similares.
Para algunos fue una
declaración de guerra del subsecretario federal de Salud, Hugo López-Gatell,
para otros simplemente ya no tenía nada que decir en aquella mañanera del 6 de agosto del presente al cuestionar algunas deficiencias de las
farmacias similares.
El doctor López-Gatell comenzó
diciendo, así, por ejemplo, que estas farmacias no resuelven ningún problema
significativo de salud y que, en ocasiones, ponen en peligro la vida de los
ciudadanos, que hay condiciones precarias, de salud y laborales.
Sus médicos viven situaciones
que vulneran sus derechos laborales, como: contrataciones eventuales, sin
antigüedad laboral, la falta de seguridad social, además que generan recetas
con medicamentos no indicados de manera correcta, ya que el único objetivo de
la farmacia es que le compren.
Las cadenas de farmacias y
consultorios de salud privada salieron del desmantelamiento de la salud pública
en México, sin ser su culpa; y finalmente dijo que sería deseable cancelar
estas farmacias, pero no se puede.
‘No podemos cancelarlas
de tajo, lo deseable es que no existan, en la medida de que el sistema público
garantice la gratuidad, la universalidad, y la calidad sea atractiva para el
pueblo’.
En ese mismo sentido, a la
consulta de algunos médicos, enfermeras, ciudadanos, estudiantes de medicina y
trabajadores de las farmacias de similares, reflexionaron lo siguiente:
Las farmacias similares,
apoyan a la clase media y baja del país, sobre todo en el sur y sureste del
país, con sus precios de consulta y su medicina, es más práctico y menos
burocrático ir a consulta a las farmacias similares que a una institución de
salud pública, donde no tienen el cuadro básico de medicina, nunca la hay.
En los centros de salud
pública hay malos tratos al derechohabiente, médicos incompetentes, solo les
recetan la penicilina, algún jarabe y un desinflamante como el naproxeno.
Las farmacias similares son
generadoras de empleo, que de acuerdo a algunos médicos la figura del estado no
lo hace, en Guerrero, el 80 por ciento de los médicos que atienden son de la
Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro).
Las aplicaciones de
inyecciones en las farmacias similares cuestan $25.00 pesos, en la benemérita
CRUZ ROJA te cuesta entre $60 ó 70 pesos y eso que es de asistencia
social.
Y se auto preguntaron: ¿Qué
harían los egresados de medicina de la Universidad de Guerrero, sin el empleo
quedan las farmacias simulares, ante un estado mexicano que no genera plazas en
las instituciones de salud pública? Porque en primer lugar no tienen la
capacidad presupuestal para hacerlo.
Solo es una reflexión entre el
doctor Simi vs el doctor López-Gatell.
Yo Soy
federicosol@yahoo.com.mx