Federico
Nogueda Berdeja
18 junio 2018
Trazos noticias
Opinión
Místico
de lo que él ha llama trabajo, pero la gente le dice buena suerte, René Juárez
siempre fue sorpresa a lo largo de su vida partidista, en los noventa nadie
creía que fue ese presidente municipal de Acapulco, y lo fue, como el gran
paso, para de ahí alcanzar la cima de las circunstancias.
El
pensamiento que más a adoptado a lo largo de su vida política y que le ha
funcionado ha sido: ‘Yo Soy Yo y mis circunstancias, y si no salvo mis
circunstancias elles no me salvan a mí’., pero en los últimos dos años la ha
olvidado, y hoy ante las circunstancias de ganar la elección con Meade la
necesita, y en abundancia.
Aunque
llegó un poco tarde a la campaña de José Antonio Meade, en el sentido de los
tiempos, eso no implica tampoco darle un buen resultado a Meade, es decir,
ganar la elección presidencial, y esta acción ya no implica un reto, por lo
apretado del tiempo, sino esto debe de ir más allá, significa dar un salto,
saltarse el proceso, para hora si ajustar a lo que llamamos tiempo, y ahora sí,
meterse en la línea del triunfo probable.
Pero
no hagan caso a esta reflexión, es eso, solo reflexión, la idea aquí es anotar
que René Juárez, siempre le persigue eso que llaman alguna suerte, y el salto
que pude dar a lado de Meade, está en espera, de lograrse o no lograrse, de
lograrlo sería la gloria, y si no, se convertiría el eje central del priismo
nacional con los grupos o elite del poder de su partido, con los demás grupos
regionales en el interior del país.
Por
ello, no dudo en ningún momento abrirse totalmente en el mensaje que envió el
sábado ante los priistas y ciudadanos de Tlapa, como diciendo aquí estoy,
véanme, estoy totalmente abierto a la honestidad de mis palabras, y ustedes ya
lo saben les he cumplido, siempre les he cumplido en mis promesas.
Y
este mensaje de abertura no sólo fue para los ciudadanos de Tlapa, sino también
para los ciudadanos que sabe René Juárez van a decidir la elección del primero
de julio, es decir se puso a su disposición para lo que ordenen o manden, al
mismo tiempo expresaba esa garantía de ganar Meade, él sería quien les
respondería hacia Guerrero.
De
ganar Meade, ese mensaje en Tlapa de René Juárez, va hacer muy emblemático con
el tiempo, y será referencia, como un ejemplo que el político debe abrirse en
su mensaje, debe de ser honesto, ese sería otro aspecto ha rescatar de ese
acto, la pasión y emoción que imprimió Juárez Cisneros como dirigente nacional
del PRI.
El
detalle será que los demás priistas lo vayan entendiendo, lo vayan digiriendo,
con el fin de que lo vayan aplicando, es decir le ayuden a su dirigente
nacional en difundir ese convencimiento, ese sentido de abertura.
Juárez
Cisneros como dirigente nacional ya está poniendo su parte, porque ya no hay
más convencimiento que el abrirse, y eso lo ha entendido René, y le ha
funcionado, en salvar su circunstancia.